martes, 4 de junio de 2013

Suena y suena...



Es curioso que me digas que me rindo mientras estaba escribiendo esto.


También me resulta raro llevar tanto rato buscando las palabras adecuadas cuando tenía bastante claro lo que quería decirte. Pero ya lo sabíamos, me obsesiona que me entiendas bien.

Lo siento y lo siento mucho.
Sé que no es necesario y que esto ya lo hemos hablado, que voy a decirte cosas que ya sabes, pero aún así voy a procurar explicarme, que me entiendas.

No sé bien cómo explicarlo, pero lo voy a intentar, no es que no me gusta estar pendiente del teléfono, nunca lo he hecho y por eso me cuesta tanto. Sabes bien que no es por ti, que si sé que me vas a llamar procuro estar pendiente, aunque admito que no siempre lo hago.

Me gusta dejarlo ahí y simplemente despreocuparme, no digo que me sienta más libre al hacerlo sino que estar pendiente me hace sentir lo contrario, me hace sentir controlado, aunque sea yo quien deba estar pendiente. Al resto de la gente le parecerá una exageración que diga que hay que estar pendiente, pero a lo mejor es que después de tanto tiempo todavía no me he acostumbrado. Mi teoría es que no lo he hecho por la falta de uso, tal vez me equivoque.

Muchas veces pienso que todo sería más fácil sin ellos y que no sé para que lo quiero. Que sería más fácil darte sorpresas, que yo sería más independiente. Pero los dos sabemos que en cualquier siglo en el que vivamos en el XX o en el XVII me ibas a descubrir igual :D Y que eso de ser más independiente es una tontería. Es raro pensar esto cuando todo el mundo tiene un smartphone y todos quieren el próximo que se saque al mercado.

Hace tiempo un buen hombre me dijo algo parecido a que la libertad no es hacer lo que queramos cuando queramos sino tener la capacidad de elegir y decidir, que a partir de ahí entra en juego nuestra responsabilidad hacia nuestras decisiones.

Yo he elegido tener móvil porque a pesar de todo es una herramienta útil.

Ya sabes de sobra porque te he elegido a ti.

Por todo esto quiero ser consecuente, por eso siento tanto lo sucedido.

En el futuro prometo ser más consecuente y aquí lo dejo por escrito.

Esto también lo sabes ya pero también lo repito: Te quiero.